Además, una vez los microorganismos se encuentran adaptados, la presencia de cianuro provoca una etapa de retardo en la degradación del tiocianato. Sin embargo, la presencia de fenol en concentraciones de hasta 200 mg/l, favorece la adaptación de los microorganismos a la degradación del tiocianato, concentraciones superiores de fenol dificultan la degradación del tiocianato o puede llegar a inhibirla. Asimismo, la adición del resto de los compuestos de las aguas residuales de coquería sobre una corriente de 1.000 mg/l de tiocianato, favorece la degradación de este compuesto, es decir la presencia de una fuente de carbono facilita la degradación del tiocianato por parte de un lodo biológico. También, se ha observado que la presencia de cianuro, fenol o aguas de coquería no afecta a la velocidad de degradación de tiocianato.